sábado, 6 de marzo de 2010

Hanoi
























11 horas de viaje para recorrer los apenas 320 kilometros que separan Sapa de Hanoi. LLegamos a las 5 de la mañana, hacia calor, humedad, y habia mucha gente haciendo deporte alrededor del lago Honan Kien, donde habitan las tortugas que ayudaron al emperador Le Loi a expulsar a los chinos. Hanoi es un lugar particular, te llena de sensaciones dispares. Al mismo tiempo que es sucio, ruidoso, agotador, es tambien bello, humano y encantador. Esta ciudad habitada durante 1000 años ha desafiado muchos de los intentos sostenidos de urbanizacion, lo que ha dado lugar a un espacio caotico donde la homogeneidad la crean las diferencias. El barrio antiguo, o comunmente llamado las 36-calles, es un hervidero de vida a todo volumen.

El mausoleo de Ho Chi Minh es emocionante. En contra de su voluntad, los miembros del partido decidieron embalsamarlo y crear un heroe fisico, presente. Nacido en una familia educada y nacionalista, Ho Chi Minh estudio y viajo y trabajo en Europa y America, desde donde empieza a promover la cuestion de la independencia de Indochina. Despues de 30 años en el extranjero, Ho Chi Minh, regresa a Vietnam y funda el partido comunista desde donde se organiza la lucha armada contra el regimen colonial frances. Cerca del complejo del mauselo esta el museo de la mujer. En una dimension mas domestica, sin ninguna sofisticacion, se relata la vida de algunas de las mujeres que han luchado directa o indirectamente por la independencia de su pais.

El año nuevo chino, segun el calendario lunar, empieza el 14 de Febrero. Durante estas fechas se siente el ambiente festivo y, como nuestras navidades, los amigos se juntan para comer, las mesas se llenan de cosas ricas, y las calles de gente comprando. Afortunadamente, hay alguna diferencia. Todo el mundo coloca pequeños altares en sus casas y los llenan de ofrendas; queman billetes de mentira, y figuras de carton que simbolizan los desesos, salud, amor, dinero....; visitan los templos, donde formalizan sus oraciones y plegarias. Es fascinante pasear por uno de ellos, impregnarse del olor a incienso, y observar la liturgia.

Vietnam: Sapa.






















Hemos entrado a Vietnam por una puerta que tiene acceso directo con el cielo: las montañas de Sapa, territorio de comunidades minitorias como los Dzao, los Bahais, los H'Mong...que viven en las decenas de pueblos que configuran estas montañas. Los dias de mercado, Sapa se torna multicolor. Cientos de mujeres vestidas en sus trajes tradicionales llegan caminando o en moto para vender sus artesanias, comprar comida, joyitas, tela....Ellas son cercanas, parlanchinas, curiosas y sobre todo buenas comerciantes. Esta personalidad nos parece un balsamo desues de la dureza de las relaciones en China.
Dang, David y yo subimos el Fansipan, la montaña mas alta de Vientam. 3200 metros de bosque denso de vegetacion cambiante, de repente pasabamos de un mar de helechos a uno de arbustos, se iban los bambus y llegaban las encinas. Tres dias de subidas y bajadas caminando por el rio, por las crestas de las montañas, o bosque a traves. Llegamos destrozados, pero merecio la pena.

Un dia comiendo en el mercado conocimos a Senme, una mujer Red Dzao. Despues de charlar un rato quedamos para visitar su pueblo, comer con ella y ver sus artesanias. Durante el paseo de ida nos conto como la situacion de las comunidades de Sapa, si bien habia mejorado con la llegada del turismo, hace 5 años, la estructura turistica del lugar ha dejado fuera a las grandes protaganistas de Sapa. Asi las minorias etnicas no controlan nada, y apenas les queda la venta ambulante y vender sus servicios de alojamiento o transporte a las grandes empresas de trekking y city-tours...

Hemos conocido una pareja de mallorquis que lleva dos años pedaleando por el mundo. Nos resulta inspirador y nos llena de fuerza e ilusion en nuestra busqueda por una forma de vivir en libertad, de acuerdo a nuestros principios y sueños.

Yuanyang, Yunnan






















Desde Yangshuo viajamos a Nanning, donde solicitamos la visa de Vietnam con la intencion de dejar China antes de las celebraciones del año nuevo, cuando se convierte en tarea casi imposible conseguir un billete de tren o autobus y los precios de todo suben como la espuma. No obstante, decidimos hacer una incursion hacia la provincia de Yunnan antes de dejar el pais. Un duro viaje en tres autobuses nos llevo hasta Yuanyang.

La zona es un conjunto de pueblitos, poblados por las etnias Hani y Yi, conformados en espiral alrededor de un pueblo central. Es una zona montañosa en la que todo el territorio esta cubierto por terrazas para el cultivo del arroz. Poder contemplar como la luz incide en el agua de estas terrazas a distintas horas del dia, tiñendo el paisaje de plata y negro, es una experiencia magica, abstracta. El lugar se llena de fotografos chinos con equipos profesionales, sobre todo al amanecer y al atardecer...y ni tan siquiera esa inevitable comercializacion del lugar, tan china, pudo evitar que disfrutaramos de una preciosa experiencia, paseando arriba y abajo, de pueblo en pueblo, observando como las gentes trabajan la tierra, tratan de conducir bufalos entre el laberinto de terrazas inundadas o, incluso, como celebran un funeral: con comida, petardos, estandartes y una colorida procesion.